jueves 4 de julio de 2024

Cooperación internacional

Abby Finkenauer: "Es vital que los jóvenes participen en política"

La Enviada Especial del Departamento de Estado para Asuntos Globales de la Juventud de EEUU llegó al país para encontrarse con becarios que participaron en diferentes becas y conocer las inquietudes de la juventud boliviana.
La Enviada Especial del Departamento de Estado para Asuntos Globales de la Juventud, durante un encuentro con periodistas.     FOTO: Jorge Soruco/Visión 360
La Enviada Especial del Departamento de Estado para Asuntos Globales de la Juventud, durante un encuentro con periodistas. FOTO: Jorge Soruco/Visión 360

Abby Finkenauer conoce muy bien las dificultades que enfrentan los jóvenes que deciden postular a un puesto público. Pese a eso es consciente que se puede logar, ya que en 2018 se convirtió en la primera mujer en ser elegida como representante de su estado, Iowa, en el Congreso de los Estados Unidos y la segunda más joven, con 29 años, después de su colega Alexandria Ocasio-Cortez.

Ahora es la primera Enviada Especial del Departamento de Estado para Asuntos Globales de la Juventud, lo que la trajo a Bolivia. Durante su visita se encontrará con jóvenes que se beneficiaron gracias la Iniciativa Jóvenes Líderes de las Américas (YLAI) del Departamento de Estado de EEUU, programa que le permite viajar al país del norte y trabajar y aprender en empresas de sus áreas, además de conocer el trabajo e interés en la política por esa parte de la población.

"Es vital que los jóvenes participen en la política, que se conviertan en los que toman las riendas", aseguró durante un encuentro con periodistas paceños.

Abby Finkenauer en el encuentro con los periodistas.    FOTO: Jorge Soruco/Visión 360

 

Finkenauer nació en 1988 en una población rural, "donde viven más vacas que personas". Hija de un soldador y una secretaria escolar, es la primera de su familia en estudiar en la universidad.

Fue durante su formación que descubrió su interés en la política de su estado y de su país. "Mis maestros me incentivaron a fijarme en lo que ocurre en el país, como se determinan las normas y la dirección. Fue así que mi transición a trabajar en el servició público se dio casi sin darme cuenta", contó.

Miembro del partido Demócrata, reconoció que no fue fácil entrar a un sistema básicamente gerontocrático, en el que políticos octogenarios eran predominantes. "Hay muchas barreas que enfrentan los jóvenes. Las hay generacionales, culturales, económicas y hasta personales. Pero creo que soy un claro ejemplo que si nos proponemos algo podemos lograrlo".

En ese sentido, reconoce que el presidente Joe Biden fue un gran apoyo e inspiración. "El mandatario también fue elegido como representante a los 29 años. Comprende muy bien los retos que enfrentan las nuevas generaciones y por ello estableció mi oficia en 2022".

Por eso llegó a Bolivia, en su primera visita a Sudamérica. Durante estos días se encontrará con los becarios de diferentes ciudades -La Paz, El Alto y Santa Cruz- para conversar acerca de cómo fueron beneficiados y el trabajo que realizan.

"Algo que me sorprendió gratamente es la profunda consciencia social de los bolivianos. Han llegado a su lugar de origen con la idea de beneficiar a sus vecinos, no solo a sí mismos", reveló. Como ejemplo contó el caso de un especialista en agricultura urbana que está trabajando para educar a sus coterráneos en el tema y una mujer que estableció un mercado de artesanías con el objetivo de remunerar justamente a los participantes.

Asimismo aprevechará las reuniones para hablar de la seguridad digital. "Estamos en una época en la que el internet no es seguro y es nuestro deber el tratar de cambiar eso. No es fácil, tenemos que caminar por una delgada línea entre el respeto a la libertad de expresión y la lucha contra amen azas de muerte, acoso virtual y otras".

En este punto volvió a enfatizar en la importancia de incentivar la participación de jóvenes en política, ya que "son los que están más afectados por esto y quienes pueden encontrar soluciones".

Asimismo mencionó que este tipo de encuentros también buscan recuperar la discusión cara a cara, de establecer lazos con quien no concuerda con las ideas de uno, de no considerarlo un enemigo. "En todo el mundo se ha desatado una fuerte polarización. Hemos perdido la capacidad de poder hablar con quien tiene una posición distinta sin agredirnos, sin verlo como un enemigo irreconsiliable".