Ahora la culpable es la Inteligencia Artificial

Desde hace un buen tiempo todo lo malo que le pasa al país es culpa de alguien muy lejano a nuestras fronteras, pero que digita con sus satélites y hace sus travesuras. Es el imperialismo el responsable de la crisis económica, de la violencia política, de la violencia hacia la mujer, del atraso del país, en fin, le llueven las denuncias, hasta que se descubrió un espía norteamericano -Manuel Rocha- que trabajó para el régimen de Fidel Castro.

Ahí vemos a Maduro -hace más de ocho años- que responsabiliza al imperio yanqui de afanes desestabilizadores contra su gobierno. A Díaz Canel de Cuba que reflotó el sentimiento antiyanqui y que la crisis que ahora atraviesa la isla es culpa del país del Norte. Ni se diga los gobernantes de Bolivia (Evo Morales y Luis Arce) han identificado al eterno enemigo de la democracia boliviana: Clinton, Obama, Trump, Biden. Cero autocríticas y valentía para afrontar sus realidades y superarlas desde adentro.

Sin duda, el imperio es responsable de muchas cosas y de hechos históricos que nos han hecho mucho daño, para mencionare algunos: su apoyo incondicional a las dictaduras militares en América Latina; la implementación del terrorífico Plan Cóndor para hacer desaparecer a los revolucionarios y el sostenimiento del permanente e injusto bloqueo para tumbar al gobierno socialista de Cuba. Es innegable su intervención en las democracias de la región; pero de ahí a responsabilizarlo de todo, con la yapa que la derecha está metida en esos afanes.

El escritor francés, Gustave Flaubert, les dedicó una lapidaria frase a los políticos. “No tengo simpatía alguna por ningún partido político o, mejor dicho, los aborrezco a todos, porque todos me parecen igualmente limitados, falsos, pueriles, empleados en lo efímero sin visión de conjunto y sin elevarse jamás más allá de lo útil”.

Pero ahora van encontrando otros responsables de tantas irregularidades, metidas de pata, hechos de corrupción del poder de turno. Además del imperio y de la derecha, ahí está la poderosa Inteligencia Artificial que viene fabricando videos, audios, fotografías bastante comprometedoras que delata que ciertos personajes del poder están metidos en hechos oscuros, feos, indignantes, de corrupción e incluso de abusos sexuales.

Pero los aludidos o los que aparecen en esos videos y audios no tienen empacho y ni se les mueve un pelo que salen afirmando que ellos no son los que están ahí en el video y en el audio, sino que es la Inteligencia Artificial, la omnipotente tecnología que está maravillando al mundo.

“Hay un enjambre de abejas. Nos atacan en bloque, en masa. Utilizan, difunden información falsa, incluso, a través de WhatsApp. Por último, el uso de Inteligencia Artificial (IA). Hoy están recurriendo todos los renovadores a la Inteligencia Artificial para simular la voz de los líderes. Ya han usado de Evo, de Andrónico… Seguramente van a usar de Loza (Leonardo), de Héctor Arce”, acusó el asambleísta “evista”, Héctor Arce.

“Van a ir a visitarte, por fa, ¿ya? Ya ahí hablamos y cualquier candidato que tengas, Miguel, empezá a mandármelo, ¿ya? Voy a pasar el número a los dos compañeros para que te llamen, para que preparen la oficina, todo y con confianza, Miguel, por fa, ¿ya?”, le dice la interlocutora, quien también sería parte de la comisión al presidente de la Comisión Mixta de Constitución, el evista Miguel Rejas.

Luego saldrían a declarar que el autor intelectual y material de esos audios es la tecnología, que tiene en la Inteligencia Artificial su mejor instrumento para desprestigiar o hacer daño al enemigo. Que no sorprenda que, si siguen difundiéndose esta clase de videos y audios, sus protagonistas nunca admitirán que son ellos, con su voz y su rostro, los que están negociando cuotas de poder, comisiones de obras públicas, pegas para familiares, seduciendo a mujeres y pidiendo un trío para sus orgías sexuales.

En Bolivia el uso de la Inteligencia Artificial está en pañales, aun faltan muchos recursos y personal para producir niveles altos de videos o audios de la magnitud que aparecen en la realidad y que tienen una amplia difusión, debido a sus contenidos escabrosos y vergonzosos del ejercicio del poder de algunos diputados o dirigentes, quienes de forma rápida se lavan las manos de sus tropelías y abusos que cometen concentrando sus argumentos que esos audios son manipulados, inventados y que ellos son “santas palomas”.

El ejercicio del poder en Bolivia se ha envilecido, corrompido, violentado al extremo la moral y la ética. Cada día conocemos de algún hecho de corrupción, de alguna irregularidad, de ciertos niveles de nepotismo, no solo a nivel central sino en las gobernaciones y municipios.

En definitiva, quienes ejercen el poder, deben ser conscientes que están ahí por alguna razón fundamental, no para embozalarse millones, ni favorecerse con contratos y obras. “Cuesta mucho distinguir a los estúpidos que se hacen pasar por canales de los canallas que se hacen pasar por estúpidos. Por eso será siempre difícil juzgar bien a los políticos”, señaló Arthur Schntizler, escritor y crítico.

*La opinión expresada en este artículo es de exclusiva responsabilidad del autor y no representa una posición oficial de Visión 360.